Paulo Dybala tenía todo arreglado con el Al-Qadsiah de Arabia Saudita. Contrato de 80 millones de euros por cuatro temporadas. Sin embargo, dio marcha atrás en su decisión y se quedó en la Roma. Luego de la derrota ante Empoli en la Serie A, el cordobés explicó los motivos para haber rechazado semejante oferta.
Pocas cosas se esperaban menos que la salida de Paulo Dybala de la Roma. Y ni hablar si era al fútbol de Arabia Saudita, que a pesar de su falta de competencia, se fue ganando la consideración de los jugadores profesionales a temprana edad. Sin embargo, el pedido incesante de los hinchas del conjunto italiano, que se hicieron oír en las calles bajo la frase "Paulo no se vende", surtió efecto: La joya dio marcha atrás con su decisión y seguirá vistiendo la camiseta del conjunto capitalino.
Pese a que casi tenía todo arreglado, explicó qué lo llevó a decidir rechazar la millonaria propuesta. "Puse muchas cosas sobre la mesa: mi familia, mi esposa, la ciudad, el equipo y la posibilidad de volver a la Selección Argentina. Aunque se critica mucho por mis lesiones, me siento bien y estoy comprometido a trabajar duro cada día".
"No podés ignorar el dinero, pero hay muchas otras cosas a considerar. Mi agente, que es un amigo, también valoró mi bienestar. No es cierto que él iba a ganar una gran comisión por el traspaso. Para él, lo más importante era mi felicidad y mi decisión de quedarme en Roma", agregó el cordobés. Y se refirió a la reacción del club saudita: "No sé cómo lo tomaron, porque no hablé con ellos".
El agradecimiento de los hinchas en la casa de Dybala
La gratitud de los simpatizantes se extendió, luego de conocida la noticia, a las afueras de la casa del cordobés, donde se amucharon clamando su nombre.