La Selección Argentina derrotó 1-0 a Paraguay, por una nueva jornada de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026, ante una multitud que armó una fiesta en el Monumental para alentar a los campeones del mundo y, por supuesto, enloquecer con Lionel Messi.
Los fanáticos colmaron el estadio de River para apoyar a la Scaloneta, que busca su tercera victoria al hilo en el certamen clasificatorio a la próxima Copa del Mundo (que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá). Más de 80 mil espectadores colmaron el Monumental y lograron hacer sentir su presencia incluso antes de que Raphael Claus haga sonar el pitazo inicial al entonar "Muchachos", uno de los grandes hits dentro del repertorio del combinado nacional.
Otro gran momento dentro de la previa fue cuando en los altoparlantes del estadio Antonio Vespucio Liberti sonó "La Mano de Dios", el gran homenaje de Rodrigo a Diego Armando Maradona que se cantó a todo pulmón mientras el sol empezaba a bajar a la vera del Río de la Plata.
A meros instantes del arranque del partido y con los jugadores de la Albiceleste ya en el campo de juego, el público mostró una vez más su gran cariño mientras para con el elenco que viene de consagrar campeón del mundo en el Mundial de Qatar 2022 con un cántico dedicado especialmente a su gran capitán y figura. "Vení vení, cantá conmigo, que un amigo vas a encontrar, que de la mano, de Leo Messi, todos la vuelta vamos a dar", bajó desde cada rincón del Monumental.
El Monumental fue marco de una nueva emotiva entonación de las estrofas del himno nacional Argentino por parte de Abel Pintos, lo cual se vivió de gran manera y sentó las bases de una euforia colectiva a instantes del inicio del partido.
Solo tres minutos pasaron desde el pitazo inicial que llegó la primera gran alegría de la noche, cuando Nicolás Otamendi remató de volea gracias al milimétrico centro de Rodrigo De Paul para romper las tablas en el marcador y desatar la locura en el barrio porteño de Núñez.
Con la enorme tranquilidad de ya estar en la delantera en el marcador, el público presente en el Monumental aprovechó la gran cantidad de pases consecutivos para cantar "olé" cuando el reloj de juego recién marcaba 18 minutos.
El gol de ventaja sumado al gran display futbolístico llenaron de ilusión a todos los presentes, que se unieron para volver a cantar todos juntos "Muchachos" ya no pensando en la tercera estrella sino con los ojos puestos en la cuarta conquista mundialista.
Con solo cinco minutos en la segunda etapa, dijo presente Lionel Messi al tomar el lugar de Julián Álvarez en un momento donde todos los presentes en las tribunas intentaron capturas con sus teléfonos celulares al astro rosarino en su partido 177 con la Selección Argentina y el primero desde lo personal tras la lesión sufrida ante Toronto FC en el pasado mes de septiembre.
En un segundo tiempo donde la Albiceleste gozó de grandes chances de gol, la más clara fue un tiro libre a menos de veinte metros de Lionel Messi que se estrelló en el primer palo de Carlos Coronel, ahogando el grito de gol a falta de un minuto para la finalización del encuentro.
* Imágenes generadas con un Motorola Moto G200.