En enero de 2022, la Justicia de Italia confirmó la sentencia de nueve años de prisión para Robson de Souza, conocido en todo el mundo como Robinho, por violar junto a un amigo y otros individuos a una chica de 23 años en una discoteca de Milán en 2013. Mientras el ex futbolista sigue en Brasil a la espera de saber si será extraditado hacia Europa o no, el brasileño confirmó su retiro del fútbol profesional.
El medio UOL Esporte logró dialogar con Robinho, quien fue tajante con respecto a su futuro. “¡Ya no juego! Déjame en paz. No quiero dar ninguna entrevista. Si puedes dejarme a mí y a mi familia en paz, ¡te lo agradecería! Preguntabas por Santos. Santos siempre ha sido y siempre será mi casa. ¿No hay ningún personaje más importante del que hablar?”, expresó el ex Milan.
Luego, agregó: “¡Ya no juego! No publico mi vida en internet, y tú sigues hablando de mí. Hay mucha gente con ganas de dar una entrevista, aparece. Solo quiero que me dejes en paz”. El ex delantero de la Selección de Brasil tiene paradero desconocido, y al estar tan trabada su extradición hacia Italia, los países barajan la posibilidad de que cumpla su condena completa en suelo brasileño.
Por qué Robinho podría evitar la cárcel
La constitución de Italia prohíbe la extradición de brasileños. Además, el tratado de cooperación judicial en materia penal entre ambos países (firmado en 1989 y todavía vigente) no prevé la aplicación de las penas en territorio brasileño a raíz de una condena impuesta por la justicia italiana.
Lo que todavía no quedó claro es si se emitirá una orden de detención internacional que podría ejecutarse en el resto de la Unión Europea. “La sentencia debe cumplirse. Brasil es un gran país y espero que sepa lidiar con esta situación. Si fuese en Italia, iría a prisión”, afirmó el abogado de la víctima.