Niclas Füllkrug, el responsable de que la Selección de Alemania clasifique a los octavos de final como primero del Grupo A, se convirtió en el delantero suplente sensación de la Eurocopa 2024. ¿Por qué? Sus números hablan por sí solos: marcó más goles saliendo desde el banco que cualquier otro jugador. Hizo dos en el Mundial de Qatar 2022 (vs. España y Costa Rica) y otros dos en el presente certamen (vs. Escocia y Suiza), con la particularidad de que casi siempre son los que definen el marcador.
Su imponente cabezazo en el Deutsche Bank Park, en tiempo añadido, reabrió el debate sobre su posible titularidad en el lugar de Kai Havertz, hasta ahora el preferido de Julian Nagelsmann. Y es que, según las estadísticas, el delantero del Borussia Dortmund, de 31 años, convirtió 13 tantos en 19 partidos con la camiseta de su país. Unos números que llaman la atención, sobre todo si se tiene en cuenta que los consiguió en tan solo 750 minutos, es decir un grito cada 58.
Nagelsmann tiene un once que hasta ahora es intocable y no parece querer cambiar lo que aparentemente funciona de cara a los octavos de final ante el segundo del Grupo C (Inglaterra, Eslovenia, Dinamarca o Serbia). Repitió sus tres alineaciones y Füllkrug no ha entrado en ninguna de ellas, a pesar de que Havertz consiguió solo una anotación (vs. Escocia, de penal). "Ofrece argumentos para jugar desde el principio, pero también para seguir saliendo desde el banquillo", explicó el DT sobre el 9 tras el cierre de la fase de grupos.
Y agregó: "Kai también hace un buen trabajo allí, pero Füllkrug sale bien desde el banquillo. Es un poco difícil decidir aquí. Pero dependerá de contra quién nos enfrentemos en octavos de final y luego en cuartos de final".
Gracias a un agónico cabezazo en el minuto 92, la Selección de Alemania amarró el liderato del Grupo A y gozará de unos octavos más asequibles (siempre que no se dé el batacazo e Inglaterra termine segundo en su grupo) que los que aparecían en el horizonte con Italia o Croacia como posibles rivales. "No sé cuál es el secreto. Porque no estoy acostumbrado a salir del banquillo cuando juego en mi club", admitió el surgido en Werder Bremen.
Pero Füllkrug no solo marcó un tanto clave para su selección. También hizo historia. Igualó a Oliver Bierhoff con un registro casi inédito para Alemania en la historia de la Eurocopa. Desde la edición de Inglaterra 1996, nadie en el conjunto germano había anotado dos goles en un mismo torneo entrando al terreno de juego como suplente.
Ahora, tiene a tiro el récord absoluto en poder de Dieter Müller, el jugador alemán que más goles ha marcado desde el banquillo en el torneo: en total celebró tres, los que hizo a Yugoslavia en la semifinal de 1976 después de ingresar en el campo en el minuto 75 con 2-1 en contra en el marcador. Empató el partido en el 85 y luego en la prórroga celebró otros dos tantos para dirigir la victoria del combinado germano (2-4).
Han pasado décadas desde aquella gesta de Müller y Füllkrug no quiere igualar ese registro. Seguramente, el delantero de Borussia Dortmund prefiere jugar desde el inicio los octavos de final. Nagelsmann, de momento, parece que no cambiará de opinión. En sus declaraciones tras el empate ante Suiza aplaudió a Füllkrug, pero no mostraron señales de cambios en su once.
"De nuevo hizo un buen gol. Es importante que los suplentes sean jugadores capaces de marcar goles decisivos. Analizamos a los rivales para elegir la alineación titular y luego puedes meter a distintos jugadores desde el banquillo", aseguró en rueda de prensa.
Esas palabras, salvo sorpresa, auguran una nueva suplencia para Füllkrug. Sin embargo, el debate está abierto en Alemania, que ven a su jugador revulsivo como un buen recambio para el hasta ahora menos acertado Havertz.
Sin embargo, parece que Nagelsmann no cederá y apostará por mantener intacto un ecosistema hasta ahora exitoso pero que exhibió alguna grieta ante Suiza: Neuer; Kimmich, Rüdiger, Tah, Mitteñstadt; Andrich, Kroos; Musiala, Gündogan, Wirtz; y Havertz. Ese es el once de Alemania que se recita de memoria. Y dentro, por el momento, no tiene hueco Füllkrug.