El fallecimiento de Luis Romio dejó un vacío en la Federación Argentina de Box (FAB). La entidad regidora del pugilismo en nuestro país perdió un gran ser humano, pero además a su presidente. A partir de esto, será nuevamente Osvaldo Bisbal, quien ocupaba el cargo de vicepresidente, que tomará la presidencia, en un interinato que pretende no se extienda más allá de marzo de 2022. Y con ello, se espera que jóvenes dirigentes queden al frente de los puestos principales.
Pasaron tan solo unos días, luego de la triste noticia del domingo de la muerte de Romio, quien ocupaba la presidencia en su segundo mandato consecutivo, tras haber asumido en 2016. Fue precisamente hasta ese año que acompañó como vice a quien hoy lo sucede. Y ahora, será nuevamente Bisbal quien regrese al máximo cargo de la entidad, que presidió durante más de 24 años, tras asumir en 1991. Con dolor pero reflexivo, dejó sus sensaciones tras lo ocurrido, e informó la resolución reglamentaria de la FAB.
“Fue muy duro (NdR: enterarse del fallecimiento). Fueron muchos años de amistad, de relación, de trabajar juntos. Luis Romio fue un hombre de boxeo. Vivió para el boxeo. Vivió para la Federación y en la Federación. Toda su vida estuvo ligada al boxeo. Sabía lo que hacía, sabía lo que decía. Amaba este deporte”, manifestó Bisbal en el programa Puro Boxeo, que se emite todos los domingos a la medianoche por radio La Red, de Buenos Aires.
“Por lo pronto, yo quedo a cargo de la presidencia de aquí hasta marzo del año que viene, que se llamará a elecciones”, agregó.
Bisbal, Romio, junto a nombres como Jorge Molina, Carlos Rodríguez -fallecido en octubre de 2016-, Luiz Zelikowicz y Hugo Rodríguez Papini, entre otros, forman parte de un grupo de directivos que han cumplido con diferentes roles dirigenciales por más de dos décadas. Nuevos dirigentes se han venido formando durante los últimos años, y es por eso que el flamante presidente considera que es hora que ocupen puestos preponderantes.
“Después de marzo tiene que venir un cambio. Mi intención es no continuar. Ya lo había dicho en 2014 (NdR: cuando decidió no presentarse a una reelección). Es mi deseo. A quien venga, obviamente lo voy a ayudar. Voy a estar a su disposición. Pero no tengo intenciones de presidir”, reveló, en conversación con Nicolás Samuilov, Guillermo Favale, Horacio Pagani y Fabián Martino.
“No se trata de que aparezcan los nombres. Los nombres están. Hace un rato que mucha gente viene diciendo de una renovación. Pero si se analiza, y se toman los nombres que hay desde los últimos años, se darían cuenta que hay varios nombres nuevos, que hoy ya no son nuevos. Han ido ocupando lugares, creciendo de a poco. Esa gente seguro que va a ser quien va a tomar la Federación en un futuro”, explicó.
Esa generación en la que tiene muchas expectativas, procura que tome las riendas, aunque también advierte.
“Hay nombres que están hace muchos años, pero son jóvenes. Pero tampoco lo cargos por sí solos dicen nada. Los cargos hay que ganárselos, como nos los ganamos nosotros en el año ’91. Y eso es lo que espera de esta gente joven”, instó.
Se trata de dirigentes bien conocidos en el día a día del ambiente boxístico, pero que resultan algo más ajenos al público en general.
“No tengo problema en dar nombres, pero no los voy a relacionar con cargos porque no corresponde. No voy a decir ‘fulano a tal cargo’, ni nada de ese estilo, porque no queda bien y además se tiene que dilucidar, conversar. Hay mucha gente para muchos cargos. Hay mucha gente joven, como Hernán Salvo, Lautaro Moreno, Jesuan Letizia, Manuel Vilariño, Fernando Servide, Gerardo Poggi… Quince o veinte muchachos hay”, puntualizó.
La Federación Argentina de Box tiene como principales fuentes de ingreso los contratos televisivos -con TyC Sports-, y las actividades autogestionadas por la entidad. Sin embargo, existe un error en que se suele incurrir que es atribuir que la FAB percibe ingresos públicos para el desarrollo del amateurismo. Bisbal lo explica.
“Nosotros no recibimos nada del Estado. No sé de dónde sale esa idea de que la Federación recibe dinero para el boxeo amateur. La Federación no recibe ningún dinero. Lo único que recibimos son tickets aéreos, y pago del alojamiento en el caso de ir a un evento, pero no recibimos dinero. Damos todos los datos para que la Secretaría de Deportes haga los depósitos o transferencias correspondientes. Es más, las becas a los boxeadores se les deposita directamente en las cuentas de los chicos. Como debe ser”, informó.
Y tras ello, especificó: “Nosotros recibimos dinero de los contratos de televisión, la Escuela Argentina de Boxeo, y las actividades de nuestro gimnasio. Antes de ello, percibíamos del alquiler del estadio, principalmente a partidos políticos, cosa que fue desapareciendo de a poco”.
Sin embargo, destacó el crecimiento sostenido del deporte, que lleva tres décadas con un común denominador que permanece prácticamente inalterable, y cuyas únicas variables resultan beneficiosas.
“¿En qué país del mundo existe un contrato televisivo con 30 años de durabilidad? En ninguno. Nos lo dicen incluso los extranjeros. Y nosotros lo tenemos. Lejos de caernos, como dijeron algunos muchas veces, se agrandó el contrato. Arrancamos con dos fechas por mes, y ahora tenemos siete por mes. Y eso hay que celebrarlo”, subrayó.
El contexto general no invita a pensar en grandes cambios para lo que resta del año. “Es un año muy particular, con el Covid, y todo lo que es de conocimiento público”, señaló. Pero para 2022, se espera que lleguen.