Miguel Ángel Russo llegó a Boca en 2007 y a fin de año, tras haber ganado la última Copa Libertadores que Boca tiene en su vitrina, dejó el club. Luego de su paso, el Xeneize jamás pudo volver a alzar el trofeo. Sin embargo, a principios de 2020 y después de la partida de Gustavo Alfaro como entrenador, volvió en búsqueda de repetir la hazaña ocurrida trece años atrás.
En su partido por la Copa de la Liga Profesional frente a Atlético Tucumán, el nacido en Lanús llegó a sus 100 partidos como entrenador de la institución. En poco más de un año, Miguel logró dos títulos y tiene un alto porcentaje de efectividad.
Su segundo ciclo comenzó de forma soñada: una racha ganadora de seis partidos corriendo de atrás a River para superarlo en la última fecha y conquistar la Superliga 2019-20, una semana antes de la suspensión de la competencia por el coronavirus. Una vez reanudada la actividad, el Xeneize completó un invicto total de 16 partidos, con 13 triunfos hasta que en la tercera fecha de la Copa Liga Profesional, como local ante Talleres, sufrió la primera derrota del período, mientras que una semana después volvió a caer en La Bombonera ante Lanús. Pero más allá de todo, existe todavía el reproche por la eliminación internacional de la última Libertadores contra Santos en Brasil.
La mística copera de la que todos hablan que tiene Boca viene desde hace unos años pasando por una etapa complicada. Entre medio de los dos ciclos de Russo, el elenco azul y oro ha perdido dos finales (2012 y 2018) y tres semifinales (2016, 2019 y 2020). El hincha está cada vez más impaciente y Miguel lo sabe, porque con ganar los torneos locales no alcanza y solo hay laureles cuando se trata de un título internacional. ¿Podrá el entrenador recuperar la alegría de los fanáticos en la próxima copa y ganar su segunda Libertadores con el club?
El regreso de Riquelme en 2007 con Russo como entrenador
Román firmó a préstamo en febrero de 2007 para disputar la Libertadores y terminó siendo la figura de ese Boca y la competición, con una actuación suprema en la vuelta contra Gremio. Tras un semestre de conflicto con Manuel Pellegrini en el Villarreal -y de haber jugado el Mundial de Alemania 2006 con la Selección y pisar las semifinales de la Champions League con el club español- arribó sin ritmo físico ni futbolístico. Sin embargo, con el correr de los partidos terminó exhibiendo una de sus mejores versiones.
El histórico gol de Palermo de mitad de cancha
Tras el debut de Riquelme en el empate 1-1 contra Rosario Central en la Bombonera por la segunda fecha del Clausura 2007, Boca visitó a Independiente en cancha de Racing. El Rojo de Jorge Burruchaga se puso en ventaja por el tanto en contra de Emiliano Armenteros pero el equipo de Russo lo dio vuelta (todavía en el primer tiempo) con Neri Cardozo y Rodrigo Palacio, tras asistencias de Román. En el complemento fue expulsado Éver Banega y con el Xeneize replegado en defensa, Martín Palermo presionó en mitad de cancha al Rengo Díaz, vio adelantado a Ustari y pateó desde la mitad de cancha. Anotó el 3-1 que sería definitivo desde una distancia de 61 metros y que quedó guardado en la mente y corazón de todos los hinchas.
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