Las finales de la WNBA no le dan respiro a los fanáticos del básquet. A diferencia de lo que sucedió en la rama masculina, la definición de la competencia más importante no muestra un liderazgo claro de alguna de las franquicias, sino que los duelos han sido extremadamente parejos, intercambiando localías y brindando un espectáculo inigualable. En ese contexto, en el tercer duelo, las Liberty dieron vuelta un partido que parecía perdido, y lo ganaron con un triple cercano a la mitad de cancha de una de las figuras de la competencia.
“Confío en mi preparación. Estoy lista para este momento. Confíe en que la podía meter”, le dice con respiración agitada a la entrevista post partido. Unos segundos atrás, Sabrina Ionescu acaba de hacer lo que toda persona sueña desde que agarra una pelota de básquet. La anaranjada en sus manos, todos los ojos sobre ella y un triple que silencia al público local. Una verdadera bomba que le da a las Liberty no sólo el 80-77 para ganar, sino también el 2-1 en las finales. La pregunta de la periodista es correcta. Porque no fue su mejor noche con el tiro, ni tampoco venía de ser una anotadora en las segundas mitades de la definición. 11 de sus 13 puntos en el tercer juego llegaron en la segunda mitad, pero había convertido tan sólo uno de sus cinco lanzamientos en el último cuarto. Poco importó toda esta estadística cuando hubo que definir la historia.
El tiro de Sabrina Ionescu es un broche de oro para las Liberty. El equipo neoyorquino necesitaba recuperar la ventaja de localía luego de caer en el primer partido. Había estado 14 puntos abajo en este tercer asalto. Lo levantó principalmente por Breanna Stewart (30 puntos, 11 rebotes y 4 bloqueos) y por una gran labor colectiva en defensa. Primero hubo que meterse en el barro antes que llegue el highlight que ya recorrió a todo el planeta.
Cuando Minnesota no pudo correr, se le complicó la tarea. El local volvió a tener a Napheesa Collier como su referente: 22 puntos, nueve rebotes, cinco robos y una tapa. Pero, esta vez hubo una buena contencón a Courtney Williams (12 con un 4/14). Así, cuando el dueño de casa no pudo correr, no pudo sumar y en eso se enfocó la visita para concretar su remontada.
New York Liberty quedó a un triunfo de su primer título de la WNBA. También aseguró que, como mínimo, tendrá la chance de cerrar la historia ante su gente. No obstante, buscará sellar el cruce el viernes, cuando se vuelvan a ver las caras desde las 21hs.