En los 200 Kilómetros de Buenos Aires la lluvia jugó un rol fundamental, ya que varios binomios se vieron perjudicados por esta situación. Uno de ellos, fue el binomio de Pernía – Santero, quien se retrasó en el clasificador mientras que estaban en el liderazgo de la carrera tras un buen cambio de piloto en boxes.
“Fundamentalmente sobre el final, hasta ahí por lo menos era la misma condición para todos. Lamentablemente faltó muy poco para ganarla, se largó a llover y en esa condición obviamente los que tenían goma de lluvia se beneficiaron en la estrategia”, expresó Pernía.
Por último, el “Tanito” comentó que la lluvia le jugó una mala pasada y eso lo retrasó: “Generalmente esta carrera la gana el que hace algo como para que le salga bien y apuesta a la suerte y va del lado de él. Cuando es así no hay mucho por hacer, yo viniendo primero cuando se larga a lloviznar atrás del Auto de Seguridad, el Pace Car apaga las luces y la verdad que era entrar a cambiar goma en una condición de pista que todavía estaba para la goma lisa. Lamentablemente se larga a llover más fuerte y no pudimos defendernos con nada”.