Max Verstappen lidera el campeonato de pilotos de la F1 en la temporada 2024 y parece estar cerca de poder abrochar su cuarto título de manera consecutiva. Sin embargo, su camino al estrellato no fue sencillo y uno de sus ex-compañeros en Red Bull -con quien coincidió en diversas categorías a lo largo de carrera- relató un nuevo caso del maltrato que sufrió el tricampeón del mundo por parte de su padre Jos Verstappen en el inicio de su trayectoria.
En el marco del documental “Né pour gagner” (Nacido para ganar) acerca de la carrera del neerlandés de Canal + es que participó Pierre Gasly y ahondó en un duro episodio que debió atestiguar tras una carrera de karting en España. “Después de una cita en España, yo gané la carrera y Max terminó segundo detrás de mí. Volvió y su padre perdió los papeles, gritándole en neerlandés, y luego lo insultó en inglés con palabras que no repetiré en cámara, pero que no eran agradables. Agarró el casco de Max, lo cogió y se lo tiró diciendo, ‘¡no, vete, vuelve a la carpa, ni siquiera puedes ganar una de tus carreras!’, esto demuestra que la presión era obvia, era una presión muy fuerte, carrera tras carrera”, explicó el actual piloto de Alpine que compartió con Verstappen durante la primera mitad de la temporada 2019 en Red Bull.
“La presión constante de su padre le enseñó a no dejar ni un centímetro dentro de la pista. Así acumuló tres títulos mundiales de forma consecutiva”, redondeó el francés ganador del Gran Premio de Italia 2020 con cuatro podios a lo largo de su carrera en la categoría reina del automovilismo.
Este no es el primer relato que sale a la luz con respecto a la violencia que Jos ejerció sobre Max, como una situación que el propio piloto de Red Bull reconoció en una charla con uno de los canales de comunicación de la marca de bebida energizante. "Mi padre invirtió tanto tiempo en mí en los años anteriores, preparando los motores, asegurándose de que una vez que subiera a esa categoría todo estuviera listo para que ganara. Así que, por supuesto, yo estaba molesto, pero mi padre estaba realmente enfadado y decepcionado conmigo. Rompió la carpa, todo, lo tiró en la furgoneta. Tuve que recoger el kart con un amigo mío en la pista después de la carrera porque mi padre me dijo que tenía que hacerlo yo mismo. Nos sentamos en la furgoneta de regreso a casa. Quería hablar con mi padre sobre lo que pasó, mi opinión sobre el incidente, pero mi papá no quería hablar conmigo. Seguí intentándolo y en un momento dado se detuvo en una estación de servicio y dijo: ‘Fuera, no quiero hablar más contigo’".
Efectivamente, Jos dejó en esa estación de servicio a su hijo, que por ese entonces tenía 15 años, que permaneció ahí hasta que su madre Sophie Kumpen y luego el propio Jos regresó a buscarle. “De todos modos, regresó, así que está bien”, explicó con respecto al episodio que sucedió tras la definición del Mundial de Karting donde un choque dejó afuera de la carrera al joven neerlandés.
Su padre, que tuvo su propia experiencia en la Fórmula 1 entre 1994 y 2003, sumado a que cuenta con múltiples causas judiciales por hechos violentos, explicó su accionar con su hijo y esas "dura" crianza que tuvo para con él para "formar carácter". "No abusé de él, lo estaba enseñando. Fui duro con él, pero sabía lo que tenía que hacer para ser exitoso en este deporte".
Justamente, en ese tipo de situaciones fue el propio Jos quien reveló que en una ocasión forzó a un pequeño Max (de entre ocho y nueve años) a manejar en el frío hasta el dolor más extremo. "No podía mover los dedos, y no me importaba. Quería probar cosas, porque estaba construyendo motores y cambiando de chasis, y quería obtener un resultado porque quería seguir adelante. Casi no podía sujetar el volante. Y luego, cuando los dedos se volvieron a calentar, le dolían mucho. Dije ‘ah, cállate’”, en diálogo con Mundo Deportivo. En esa situación en particular, Max dio su versión de los hechos y recordó: “Estaba intentando endurecerme”.