En una habitación de la pensión de Newell´s Old Boys a fines de la década del '90, un chico con sueños de futbolista puso el álbum "Despedazado por mil partes" de La Renga, lanzado en octubre de 1996, y provocó una explosión en la cabeza de Fernando Daniel Belluschi. Aquel pibe rosarino, que todavía era un proyecto de enganche exquisito, sintió un click que lo llevó a cultivar un amor muy profundo por el rock and roll. Y aunque después tuvo una prolífera carrera como jugador de fútbol, en la que pasó porRiver, San Lorenzo, Europa y la Selección Argentina, hoy se animó a descubrir una nueva faceta laboral: entrevistador de los músicos del ámbito nacional que marcaron su adolescencia.
Este año, mientras se recuperaba de una lesión compleja en la rodilla -que sufrió cuando vestía la camiseta de Estudiantes de Río Cuarto-, un amigo, Hernán, le sugirió la idea de empezar con un podcast que tocara temas musicales y también futboleros con los integrantes de las bandas más aclamadas. “Esto surgió con el dueño de Elvis también (NdR: un establecimiento para recitales en la ciudad cordobesa). Queríamos hacer algo diferente y sacarlos de la zona de la música. Ellos se engancharon muy bien y hay mucha gente que nos sigue. Nos preguntan cuál va a ser la próxima charla. Estamos saliendo por Instagram y ahora por YouTube", cuenta el mediocampista en una charla con TyCSports.com.
El producto no podría haber tenido un nombre más alusivo a la temática: Club Atlético Rock & Roll. Ya pasaron grupos y solitas muy aclamados del género, como Iván Noble, Estelares, Conociendo Rusia, Pier y Kapanga. "El Mono fue el que más me hizo reir. Son gente muy divertida y alegre. Cada vez que nos cruzamos, la pasamos muy bien. Tienen una energía y una conexión con la gente que es única. Los disfruto mucho", revela sobre el creador de múltiples hits fiesteros, como "Me mata" o "Ramón".
Y comenta: "Esto es algo nuevo para mí.. Nos encontramos en lugares donde no estamos acostumbrados a hablar. Me impactaron todos en el hecho de que siempre fueron muy atentos y buenos conmigo. El más importante fue No Te Va Gustar, porque venían de llenar un Vélez cuatro días antes y se sentaron a charlar conmigo de fútbol, música y la vida en Uruguay. Eso habla muy bien de ellos".
Previo a su flamante rol de entrevistador, Belluschi tuvo tres etapas importantes como jugador en el fútbol argentino. La primera fue su explosión en la Lepra a principios de los 2000, que lo disfrutó como protagonista inapelable del equipo campeón del Apertura 2004 liderado por Américo Rubén Gallego. De ahí se marchó a River, donde disputó 62 partidos y anotó 13 goles entre 2006 y 2007. Si bien estuvo en un momento complejo del cuadro de Núñez, Daniel Passarella lo puso bajo su ala cuando fue entrenador, le dio la cinta de capitán varias veces, sacó su mejor versión y lo catapultó a Europa. En 2016 volvió a jugar en el plano local tras firmar con San Lorenzo. La rompió en la final contra Boca de la Supercopa nacional de ese mismo año y recién se alejó en 2020.
Esa actuación con el Xeneize, entre otras, lo depositó en la lista que armó Edgardo Bauza en la Selección Argentina para las fechas 11 y 12 de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial de Rusia 2018, luego de que Paulo Dybala se lesionara. Aunque no ingresó oficialmente, después estuvo presente en un amistoso contra Nigeria en 2017.
El tatuaje de La Renga que se hizo Belluschi y su deuda con Los Redondos
El conjunto musical nacido en Mataderos llegó a los tímpanos del santafesino cuando estaba en la pensión de Newell´s. "Yo tenía 12 o 13 años y venía de mi pueblo, Los Quirquinchos, donde escuchaba un poco de todo, pero sin darle demasiado interés a nada. Y de 65 pibes que había, 60 escuchaban cumbia. A mi me tocó la habitación rockera, con Memo Borghello, Carlitos Colombo y Leo Íbalo. Gracias a ellos pude conocer el rock y hacerme fanático. Lo disfrutábamos mucho", rememora.
En un contexto que no era simple para un chico que aterrizaba a una metrópoli como Rosario, los acordes de la guitarra de Gustavo Fabián Chizzo Nápoli sirvieron como una vía de escape: "Estuvo presente en esos momentos de soledad donde extrañaba a mi familia. Me ha ayudado muchísimo antes de los partidos y me hacía entrar a la cancha de otra manera. Le tengo que agradecer mucho a la música".
Así como el disco más popular de La Renga lo hizo convencerse de que "estaba bien ir en contra de toda la pensión", también sirvió de puntapié para tomar una decisión para toda la vida: tatuarse el logo del grupo en la pantorrilla derecha, "la parte que más significado tuvo" en su carrera futbolística. Hasta ahora es la única banda que estampó en su piel. "Estuve cerca de hacerme algo de Los Piojos. Un tatuaje por cada disco. Pero después se hicieron muchos los discos, ja. Estoy bien con La Renga", explica.
Más allá de su fanatismo, Belluschi revela que nunca cometió una locura como la que hizo Diego Placente en el 2000, que se hizo amonestar cuando jugaba en River para llegar sin apercibimientos al Superclásico contra Boca y poder estar en el recital de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota en el Monumental: "Siempre puse mi carrera como prioridad. Me perdí recitales que eran jueves porque jugaba el domingo. Era exagerado, porque había tiempo de recuperación. Pero en ese momento pensaba que era muy importante el descanso. Hoy lo veo de otra forma".
Escuchar las poesías del Indio Solari en vivo, acompañadas por las melodías de la legendaria Gibson SG de Skay Beilinson, es una de las cuentas pendientes del enganche. "La vez que los quise ir a ver en Rosario, cuando estaba en la pensión, se suspendió el show y a los pocos meses se separaron. Me quedé con las ganas de ver a una de las mejores bandas del mundo. Me hubiese encantado poder vivirlo", lamenta.
De los invitados que sueña para su programa a la simpatía por el reggae
La afición musical de quien puso de moda las rastas en el fútbol argentino, allá por el 2006, trasciende el rock and roll. "El reggae me gusta mucho: Non Palidece, Los Cafres, Los Pericos, Kameleba… Escucho bastante, sobre todo en los momentos en los que necesito tranquilidad y bajar un cambio. Me hace bien y contagia buena energía", afirma el mediocampista, que se cortó el pelo y ya no luce sus típicos dreadlocks.
En la cargada agenda de entrevistas de los meses venideros, aparecen los nombres de El Cuarteto de Nos, Los Pérez García y Caras Extrañas. Además del entusiasmo que le genera charlar mano a mano con los protagonistas de estos grupos, también sueña con tener a grupos históricos a futuro. "Me gustaría hacerle mil preguntas a La Renga y Divididos. Son dos grandes bandas del país y tienen mucha historia que contar", anhela.
Si bien la temática está destinada a un público más veterano, porque el trap y el reggaetón se apoderaron del mainstream juvenil en la Argentina, Belluschi sabe que su contenido no lleva impregnado una fecha de caducidad: "Están apareciendo géneros más nuevos, pero está bueno que haya variantes en la música. También hay bandas de rock, con otros estilos, que van llegando a la juventud. Cada uno escucha lo que le gusta y le hace feliz. Pero, como dijo Chizzo, el rock and roll no morirá jamás".
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