Las tres verduras ideales para sembrar en abril y cosechar en invierno
Abril es el mes perfecto para comenzar una huerta de otoño-invierno y estas tres verduras garantizan una cosecha sabrosa y resistente al frío.
Con la llegada del otoño, el mes de abril se presenta como una excelente oportunidad para iniciar la siembra de cultivos que se desarrollan bien con temperaturas más frescas. En la transición hacia el invierno, el suelo conserva aún parte del calor del verano, lo que permite que las semillas germinen con eficacia. Si estás pensando en armar una huerta casera o potenciar la que ya tenés, hay tres verduras clave que se adaptan perfectamente al clima otoñal argentino y que ofrecen resultados seguros y sabrosos.
Las tres verduras ideales para sembrar en abril y cosechar en invierno
Una de las más recomendadas es la espinaca. Esta verdura de hojas verdes se destaca por su rápido crecimiento y su capacidad para resistir las heladas. Se puede sembrar directamente en la tierra o en macetas profundas, y con pocos cuidados se obtienen hojas tiernas listas para consumir en apenas dos meses. Además, es ideal para incorporar en tartas, salteados y sopas invernales.
Otra opción imprescindible es el brócoli, una verdura que necesita más tiempo de desarrollo, pero que se adapta muy bien al frío. Su siembra en abril permite que el crecimiento se dé de forma lenta pero constante, alcanzando su punto de cosecha a fines del invierno o principios de la primavera. Requiere espacio y buena exposición solar, pero los resultados valen la pena: un alimento rico en nutrientes y de alto rendimiento.
La tercera recomendación es la acelga, una de las estrellas del otoño. Al igual que la espinaca, su crecimiento es rápido y soporta bajas temperaturas sin problemas. Se puede cosechar hoja por hoja o esperar a que crezca completamente, y es extremadamente versátil en la cocina. Su resistencia al frío y la facilidad de su cultivo la convierten en una aliada infaltable en la huerta de esta temporada.
Apostar por estas tres verduras en abril es una forma práctica y sustentable de producir alimentos sanos en casa. Con un mínimo de planificación, podés disfrutar de una cosecha propia en pleno invierno y darle un toque fresco y natural a tus comidas.
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